El 22 de abril de 2018, durante su entrevista con los periodistas celebrada junto con la Ministra de Relaciones Exteriores de India Swaraj, quien estaba realizando una visita a China, el Consejero de Estado y Ministro de Relaciones Exteriores Wang Yi anunció que el Presidente de Estado de China Xi Jinping y el Primer Ministro de India Modi celebrarán del 27 al 28 de abril reuniones informales en Wuhan, provincia de Hubei. Los líderes de los dos países llevarán a cabo una comunicación estratégica en torno a los cambios sin precedentes en el mundo de hoy y tendrán un profundo intercambio de puntos de vista sobre los temas globales, a largo plazo y estratégicos del desarrollo futuro de las relaciones entre China e India.
Wang Yi señaló que el panorama mundial está experimentando una profunda evolución, y China e India se están desarrollando simultáneamente a un ritmo rápido, lo que promueve una comparación más equilibrada de las fuerzas internacionales y una tendencia de paz más fuerte. China e India son ambos países de civilizaciones antiguas y son vecinos importantes y países grandes en vías de desarrollo con una población de más de mil millones. El desarrollo de los dos países es una prosperidad y progreso del tercio de la población mundial, así como un gran proceso sin precedentes de la civilización humana. Los dos países son socios naturales de cooperación, y los intereses comunes de los dos países superan con creces sus diferencias. La amistad duradera, la cooperación de beneficio mutuo y el desarrollo común son las elecciones inevitables de los dos países.
Wang Yi dijo que el socialismo con características chinas ha entrado en una nueva era, e India se encuentra en un período crítico de desarrollo y rejuvenecimiento. En este contexto, el Presidente Xi Jinping y el Primer Ministro Modi deciden celebrar esta reunión informal, que profundizará la confianza mutua entre los líderes de los dos países, harán juicios estratégicos sobre la configuración del mundo y las relaciones entre China e India y conducirá las relaciones entre China e India a dominar el rumbo general, establecer nuevos objetivos y crear nuevas perspectivas. Esto no solo beneficiará a los dos países y pueblos, sino también tendrá un impacto positivo e importante en la paz y el desarrollo regionales y mundiales.
