El 18 de junio de 2025, el miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh) y ministro de Relaciones Exteriores, Wang Yi, sostuvo una conversación telefónica con el ministro de Relaciones Exteriores de Omán, Sayyid Badr bin Hamad bin Hamood Albusaidi, atendiendo la solicitud de este último.
Sayyid Badr bin Hamad bin Hamood Albusaidi afirmó que los ataques de Israel contra Irán constituyen una flagrante violación de la Carta de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y del derecho internacional y una infracción de la soberanía y la integridad territorial de Irán. La parte omaní está profundamente preocupada por la situación actual, en especial por los ataques contra instalaciones nucleares, que podrían provocar una fuga nuclear con un impacto catastrófico en la región. China siempre ha hecho valer la justicia y defendido la paz en la comunidad internacional. Omán aprecia en gran medida esto y espera que China ejerza una mayor influencia en el restablecimiento de la paz y la estabilidad en el Oriente Medio.
Wang Yi expresó que lo justo y lo erróneo de la situación actual son muy claros. Las acciones de Israel han violado el derecho internacional y las normas de las relaciones internacionales, han vulnerado la soberanía y la seguridad de Irán y han socavado la paz y la estabilidad regionales. El conflicto también ha interrumpido el arduamente iniciado proceso de negociación indirecta sobre la cuestión nuclear iraní, echando por tierra los esfuerzos de mediación realizados por Omán a este respecto. China siempre ha abogado por la solución pacífica de todas las disputas y se ha opuesto al uso de la fuerza o la amenaza con su uso. China ha expresado, sin demora alguna, su oposición al uso de la fuerza por parte de Israel.
Wang Yi enfatizó que la prioridad actual es alcanzar un alto el fuego y poner fin a las hostilidades. Cuanto antes se logre un alto el fuego, menores serán las pérdidas. No pueden quedarse con los brazos cruzados mientras la situación regional se desliza hacia un abismo desconocido. China apoya la declaración conjunta emitida por 21 países árabes e islámicos, entre ellos Omán, la cual pide una posición equilibrada de respetar la soberanía y la integridad territorial de otros países y resolver las disputas por medios pacíficos. En la actual coyuntura urgente y crucial, la comunidad internacional, especialmente los países de la región, deberían aglutinar aún más una fuerza cohesiva, hacer valer la justicia y conformar una voz internacional en contra de la guerra, en defensa de la paz y en fomento de la solución política. Wang Yi expresó su esperanza de que los países árabes e islámicos se unan y continúen esforzándose por promover las conversaciones por la paz. China también seguirá manteniendo la comunicación y la coordinación con Omán y otros países de la región, y desempeñará un papel constructivo en plataformas como la ONU para impulsar el fin del conflicto y restablecer la paz en el Oriente Medio.