PREGUNTA: La Reunión Informal del Consejo de Ministros de Exteriores de la UE que tuvo lugar este fin de semana en Eslovenia discutió sobre el problema de Tíbet e dio a conocer una nota de prensa sobre la discusión. ¿Tiene Ud. algún comentario que hacer al respecto?
RESPUESTA: El problema de Tíbet es totalmente un asunto interno de China, en el cual ningún país extranjero ni organización internacional tienen derecho a intervenir. China expresa enérgico descontento por la discusión desarrollada y el comentario hecho por la Reunión Informal del Consejo de Ministros de Exteriores de la UE sobre la situación de Tíbet.
Los incidentes de agresiones, destrucciones, saqueos e incendios ocurridos en Lhasa y otros lugares perturbaron las actividades culturales y religiosas de la población local, sabotearon el normal orden social y constituyen graves crímenes de violencia contra los derechos humanos y la seguridad de la vida y los bienes del pueblo. Para mantener el orden social y proteger la vida y los bienes del pueblo, cualquier país responsable del mundo tomará conforme la ley medidas para impedir los crímenes de violencia. En todo el curso del tratamiento de los incidentes, el Gobierno de la Región Autónoma de Tíbet ha mostrado gran moderación, salvaguardado la justicia social y restablecido rápidamente el orden social, lo que ha ganado la sincera aprobación y apoyo de las grandes masas populares, incluidos los compatriotas tibetanos. El Gobierno chino da siempre importancia a la protección de los derechos humanos y la promoción del desarrollo de la cultura y religión tradicionales de Tíbet, ha invertido cuantiosos recursos humanos, materiales y financieros para mantener, restaurar y construir instalaciones culturales y religiosas y ha satisfecho las necesidades y demandas de las actividades culturales y religiosas de los compatriotas y religiosos tibetanos. La Región Autónoma de Tíbet ha logrado adelantos sin precedentes en los distintos aspectos. Actualmente funcionan en todo el país más de 50 instituciones de tibetología formadas principalmente por estudiosos tibetanos, que están desarrollando labores eficaces para proteger el patrimonio cultural y el folklore de Tíbet. Se aplica en Tíbet el principio de dar igual importancia a los idiomas chino y tibetano con el tibetano como el principal. La clase de lengua tibetana es asignatura principal en todas las escuelas. Entre los idiomas de las minorías étnicas de China, el tibetano es el primero provisto de normas internacionales. Se desarrollan normalmente las distintas actividades religiosas. El Gobierno Central hizo importantes inversiones para restaurar el Palacio Potala, el monasterio Jokhang y otros templos y locales religiosos. Actualmente hay en Tíbet más de 1.780 locales religiosos con más de 46 mil monjes y monjas. La libertad de creencia religiosa es planamente respetada.
Exigimos enérgicamente a la UE y sus países miembros discernir claramente lo justo de los erróneo, condenar explícitamente los crímenes violentos de agresión, destrucción, saqueo e incendio y sus culpables y dejar de medir las cosas con dobles normas y confundir lo negro con lo blanco, hiriendo una vez más a las inocentes víctimas del incidente del 14 de marzo y sus familiares, emitiendo mensajes erróneos a la comunidad internacional y la camarilla de Dalai y estimulando los crímenes de violencia de los "separatistas tibetanos".
La política del Gobierno chino para con Dalai es consecuente. Estamos dispuestos a continuar los contactos y negociaciones con Dalai siempre que él renuncie realmente su posición en pro de la "independencia de Tíbet", cese sus actividades encaminadas a escindir la patria, deje en particular de fraguar e instigar en Tíbet y otros lugares crímenes de violencia y actividades de sabotaje contra los Juegos Olímpicos de Beijing y reconozca que Tíbet y Taiwan forman partes inalienables del territorio chino. Para saberlo, no sólo escucharemos lo que dice sino también observaremos lo que hace.