El Secretario General de la ONU Ban Ki-Moon y el Emir de Qatar convocaron el 28 de noviembre de 2008 una reunión de escala reducida y alto nivel para discutir específicamente cómo enfrentar la crisis financiera. Estuvieron presentes en la reunión dirigentes de Estado o ministros de más de 30 países que se encontraban en Doha para asistir a la Conferencia de Alto Nivel de la ONU sobre financiación para el desarrollo así como responsables del Banco Mundial y de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos. La Reunión analizó principalmente la influencia que la concurrencia de múltiples desafíos como la crisis financiera, la desaceleración económica global, la crisis alimentaria, la crisis energética y el cambio climático puede ejercer sobre el desarrollo de todo el mundo y sobre los países en desarrollo en particular. Se subrayó en la reunión que en la situación actual es necesario fortalecer el multilateralismo, llevar a efecto la asociación global, aumentar la ayuda gubernamental para el desarrollo, cumplir los compromisos de apoyo a los países en desarrollo, reformar el sistema financiero y promover la terminación cuanto antes posible de la ronda de Doha de la OMC. Coincidía en la necesidad de fortalecer el papel de la ONU para promover el desarrollo común de todo el mundo. Durante el encuentro, los participantes afirmaron que en la actual situación, todos los países deben fortalecer el multilateralismo, intensificar la cooperación e incrementar las ayudas gubernamentales. Además, subrayaron la necesidad de cumplir con los compromisos adquiridos con los países en desarrollo, reformar el sistema financiero, y promover la terminación cuanto de las negociaciones de la ronda de Doha de la Organización Mundial del Comercio
He Yafei, Representante Especial del Presidente Hu Jintao y Viceministro de Relaciones Exteriores, asistió a la reunión y expuso la posición del Gobierno chino. He señaló que la comunidad internacional debe tomar la solución del problema del desarrollo como una de las claves para enfrentar la crisis financiera y hacer esfuerzos en los siguientes cinco aspectos: (1) Brindar apoyo necesario, garantizar los recursos para el desarrollo, fortalecer las instituciones para el desarrollo y ayudar efectivamente a los países en desarrollo a mantener la estabilidad financiera y el crecimiento económico. (2) Al aplicar políticas macroeconómicas, se debe prestar especial atención a los efectos que éstas puedan producir sobre los países en desarrollo. (3) Las organizaciones financieras mundiales deben adoptar medidas como el relajamiento de los requisitos para el préstamo y crear mecanismos más fáciles. (4) Contener el proteccionismo comercial e impulsar el progreso positivo de las negociaciones de la ronda de Doha. (5) Fortalecer el papel de la ONU en dominio del desarrollo.